¿Quieres unos consejos para mejorar tu pronunciación en inglés?
Hay varias palabras que son difíciles para los hispanohablantes: chocolate, vegetables, button, Spain, culture, kitchen, answer, would…
Estas palabras pueden convertirse en un problema para nuestra comunicación en el trabajo.
¿Por qué es tan difícil la pronunciación del inglés?
Pronunciar bien el inglés es una de las batallas a las que se enfrentan cada día aquellos que quieren aprender el idioma.
En España, el entorno no ayuda.
Los estudiantes españoles suelen acabar la educación obligatoria con un nivel de pronunciación en inglés muy deficiente.
Un motivo es que no se potencia la expresión oral, ya que el enfoque se centra en la gramática y la escritura.
Otra causa determinante es que la mayoría de profesores son hispanohablantes y su acento muchas veces no es el adecuado.
Sonidos españoles e ingleses
¿Opinas que la pronunciación en inglés es una pesadilla? No eres el único 🙂
Para los hispanohablantes, el principal problema para pronunciar bien el inglés es que existen sonidos a los que no están acostumbrados y se requiere mucha práctica para llegar a dominarlos.
Al mismo tiempo, la entonación también puede ser muy diferente.
En consecuencia, no es extraño encontrar a personas que pronuncian el inglés de una forma peculiar debido a que siguen usando los fonemas españoles y no varían su entonación.
Es evidente que para mejorar la pronunciación en inglés no tendremos más remedio que aprender los sonidos propios del idioma de Shakespeare.
La pronunciación inglesa presenta dificultades para los hispanohablantes
Los españoles que se enfrentan por primera vez a la fonética inglesa tienen dificultades para asimilar que una palabra se pueda pronunciar de forma diferente a como se escribe.
- Para empezar, las vocales tienen cinco sonidos en español, pero en inglés son doce.
- Así, la «a» de «cat» no es la misma que la «a» de «far».
- De la misma forma, la «s» española solo se parece a una de las cuatro «s» inglesas y la «r» española tampoco existe en inglés.
Son solo tres ejemplos sencillos para ilustrar el hecho de que la pronunciación inglesa realmente puede presentar serias dificultades para los hispanohablantes.
Especialmente en los primeros niveles del aprendizaje.
¿Cómo mejorar la pronunciación inglesa?
El estudiante debe ser consciente de la complejidad de la fonética inglesa y de la necesidad de profundizar poco a poco en su estudio sin desanimarse.
Es muy normal que al principio cueste un poco y la clave para ir mejorando reside sobre todo en la práctica regular de la pronunciación.
Por supuesto, para conseguir una buena pronunciación hay que escuchar hablar inglés de forma correcta, idealmente un acento nativo.
Es la única forma de que el oído se acostumbre a los diferentes sonidos del idioma y a relacionar la escritura con su pronunciación correcta.
Asistir a clase con un buen profesor es un primer paso, pero eso puede y debe complementarse con muchas otras acciones para entrenar nuestro oído.
Existen muchas maneras de hacerlo y la mayoría son gratuitas.
Por ejemplo, cada año en Nativos trabajamos en colaboración con la Escola Oficial d’Idiomes Esplugues y la Escola Oficial d’Idiomes para ofrecer clases de conversación con el fin de mejorar la pronunciación y fluidez en inglés.
Si realmente nos interesa mejorar nuestro acento, no es difícil aprovechar cualquier buena oportunidad de escuchar algo en inglés.
En la actualidad encontramos formas muy sencillas y accesibles para todos de mejorar la pronunciación.
- Escuchar una canción y seguir la letra
- Ver películas subtituladas en inglés para seguir la pronunciación con la escritura
- Escuchar audiolibros en inglés
- Revisar diccionarios de fonética en internet, ver la televisión inglesa por internet
- Mirar vídeos en YouTube o TikTok
- Mirar Ted Talks
- Escuchar pódcasts en inglés (busca diferentes pronunciaciones)
… son solo algunos ejemplos de acciones que permiten ir avanzando y, gracias a internet, todas se pueden hacer de forma gratuita.
Conversar con hablantes nativos para mejorar más rápido
Obviamente, a medida que nos familiarizamos con los sonidos y nuestro acento va mejorando, hay que lanzarse a la piscina y empezar a hablar sin miedo.
No hay que esperar a sonar como un nativo, de hecho, es muy probable que eso nunca ocurra.
Las clases de conversación con profesores nativos son muy recomendables para corregir errores y pulir tanto el acento como la entonación.
Es necesario rectificar los fallos de pronunciación a medida que se detectan.
De no hacerse, se corre el riesgo de caer en malos hábitos de pronunciación.
Una forma recomendable de avanzar más rápidamente en la pronunciación es conversar con hablantes nativos.
Otras opciones para practicar el idioma
Si tenemos dificultades para encontrar interlocutores, internet puede ayudarnos mediante plataformas que nos ponen en contacto con hablantes nativos como Verbling o Italki.
Todo ello pueden dar un salto cualitativo a nuestro acento y entonación.
Otra forma interesante es organizarse en clubs de conversación con amigos donde se habla en inglés en un buen ambiente, guiado por algún coordinador con un buen nivel de inglés. El momento perfecto de practicar nuevas palabras y tu pronunciación.
Nunca es tarde para aprender.
¡Ánimo con tu acento y tu Business English!