Desde el 3 de diciembre de 2018, los consumidores europeos pueden comprar libremente en cualquier tienda online de la Unión Europea.
Esto supone el fin del llamado geoblocking y obligó a las tiendas online a adaptarse para atender los pedidos de otros países.
¿Sabes qué debes hacer?
Si alguna vez has intentado comprar en una tienda online de otro país europeo, es posible que la página no te haya permitido realizar el pedido o tal vez te haya redirigido a la tienda equivalente de tu país.
Esta práctica, hasta ahora habitual, se denomina geoblocking o “bloqueo geográfico” y tiene los días contados, porque la Comisión Europea ha decidido su eliminación.
Las razones de este cambio son que las autoridades europeas consideran que el geoblocking es «discriminatorio» y frena el desarrollo del mercado único digital.
Hay que tener en cuenta que únicamente el 15 % de los usuarios compra online en otro país de la Unión Europea, en buena parte porque el 63 % de las páginas webs no permite a los usuarios realizar compras desde otro estado de la UE.
La explicación de esta limitación es que existen diferencias de precio significativas en los precios de algunos productos según el país en el que los adquieras.
Por ejemplo, el iPhone X cuesta hasta 200 euros menos si lo compras en Estados Unidos o, hasta 60 euros menos si lo compras en el Reino Unido. Sin embargo, si lo intentas comprar en la tienda de Apple en el Reino Unido, te redirigirá a la tienda de España o no te permitirá hacer el pedido al no poder introducir una dirección fuera del país.
El iPhone X es hasta 60 euros más barato en Reino Unido según cómo esté el tipo de cambio de la libra, pero te obligan a comprarlo al precio de España.
Pero hay algunos matices. Vamos a ver qué significa exactamente el fin del geoblocking y cómo puede adaptarse tu tienda online a estas nuevas reglas de juego del e-commerce europeo.
Libertad para comprar en otro país… pero con letra pequeña
De acuerdo con la nueva normativa aprobada por la Comisión Europea, a partir de la Navidad de 2018 es posible comprar en cualquier tienda de la Unión Europea y ya no se permitirán prácticas como impedir la compra o redirigir a una tienda nacional.
Sin embargo, esta “liberalización” del e-commerce tiene varios matices importantes:
-El usuario podrá comprar en cualquier tienda online de la UE, pero el e-commerce no estará obligado a entregar el pedido fuera del país en el que opera. Será el usuario quien tenga que contratar un servicio de entrega para poder recibir el pedido.
-Los comerciantes online no podrán aplicar a los clientes diferentes condiciones de pago por razones de nacionalidad o lugar de residencia. Sin embargo, sí que podrán establecer precios diferentes en un mismo producto para los distintos territorios.
-Los servicios vinculados a contenidos protegidos por derechos de autor, como las plataformas de vídeo online, los servicios de streaming de música en Internet y las tiendas de ebooks, quedarán excluidos de la aplicación del nuevo reglamento.
Tampoco queda muy claro si las tiendas online que reciban pedidos de otros países deberán cumplir requisitos legales como ofrecer la información del producto en el idioma del usuario, o las condiciones de uso y la política de privacidad del sitio.
Cómo adaptar tu tienda online al fin del “geoblocking”
Ante este panorama, es muy posible que a partir de las próximas navidades tu tienda online empiece a recibir pedidos procedentes de otros países de la Unión Europea. ¿Cómo reaccionar ante este nuevo escenario? Tienes tres posibilidades para elegir:
- No hacer nada: como has visto, en principio no tienes obligación de ofrecer información en otros idiomas ni de enviar pedidos fuera de tu país. Sin embargo, sí deberás aceptar los pedidos que recibas de clientes de otros países de la Unión Europea, por lo que no ofrecer ningún tipo de información al respecto puede resultar un poco complicado y generar opiniones negativas.
- Preparar algunos contenidos en otros idiomas: una buena idea puede ser añadir un apartado a tu página web en el que ofrezcas información dirigida a los clientes de otros países. Puedes traducir al inglés este apartado de tu tienda online y tal vez a los principales idiomas europeos, para que los compradores extranjeros que lleguen a tu e-commerce sepan a qué atenerse. También sería recomendable traducir el aviso legal para cumplir el RGPD.
- Traducir tu tienda online a otro idioma: con la nueva normativa, los clientes que quieran podrán comprar en tu tienda online aunque procedan de otro país, así que… ¿Por qué no aprovecharlo? Traducir tu tienda online al inglés y/o otros idiomas puede ser una excelente manera de conseguir más clientes y expandirte al mercado europeo, que es donde está el futuro del e-commerce. Tener un sitio de e-commerce multilingüe supone un desafío, pero con la colaboración de un traductor profesional de inglés (o el idioma que necesites), puedes hacerlo progresivamente con todas las garantías de éxito.
El fin del bloqueo geográfico es percibido por muchas empresas de comercio electrónico como un problema.
Pero en realidad puede convertirse en una gran oportunidad para las tiendas online de los países con precios más competitivos (como España).
Está claro que la intención de las autoridades europeas es eliminar las barreras para promover el intercambio de productos y servicios entre los países miembros de la UE, por lo que la supresión del geobloqueo es solo el principio…
¡Más vale que nos vayamos preparando y pensemos de manera más internacional!
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